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lunes, 17 de enero de 2011

Las Flechas de Bagration - 7 de septiembre de 1812

El sábado 15 de enero, siguiendo una noble tradición, nos reunimos en casa un grupo de amigos y amantes del wargame. Tuve la gran alegría de recibir a Leandro Gómez y Martín Boveri, dos amigazos que se tomaron la molestia de venir desde Rosario, Bernard Fuch, mi amigo francés que, con amplia generosidad, dejó sus responsabilidades hogareñas para venir a jugar (tiene su linda casa en obra y anda sufriendo por las atrocidades que le hacen los albañiles). Jorge Solari y su hijo Manuel que vino en el día de su cumpleaños, Francisco Erize quien, atendiendo gentilmente a mi pedido, no sólo vino de visita sino que jugó y jugó muy bien. Cristián Fernández que permaneció compartiendo con nosotros toda la tarde. También vino Ramiro Llovera, quien, luego de casi un año de no dar señales de vida, volvió de la mano de Jorge Solari.

Como siempre, respetando el mandato del Emperador Napoleón quien sentenció que los ejércitos marchan sobre sus estómagos, comenzamos nuestro encuentro compartiendo un frugal almuerzo regado con cervezas, vino y gaseosas. Cumplido este acto, casi sacro, marchamos al campo de batalla. Acá va el mapa, el planteo del escenario y las fuerzas enfrentadas.



El planteo

Durante la batalla de Borodino, uno de los combates mas terribles tuvo lugar cuando Napoleón ordenó tomar las fortificaciones conocidas como las Flechas de Bagration.

Luego de seis asaltos llevados adelante por los cuerpos de Ney y Davout, apoyados por el cuerpo de Caballería de Nansouty, la fortificación sur del dispositivo aún resistía incólume. Hacia las 2 de la tarde Napoleón le ordeno a Davout enviar la división Friant que estaba intacta para lanzar el séptimo ataque, apoyada por los coraceros de Saint Germaine.

Los rusos tenían para oponerle la 27º División de infantería pues los restos de la 2º División de Granaderos se estaban reorganizando y la 2º División de Granaderos Convergidos ya había sido destruida. En su apoyo estaba la brigada del Conde Duka de la 2º División de coraceros.

Históricamente este asalto también fue rechazado y arribó la 3º División de Infantería del 3º Cuerpo perteneciente el Ejército de Barclay de Tolly. Esta 3º división logró rechazar un octavo ataque, pero ante las graves bajas sufridas, y sobre todo debido a la pérdida de Bagration, los rusos se retiraron abandonando las fortificaciones

El terreno es llano, las alturas son de una cota y descuentan según reglamento. Todos los modelos de árboles ofrecen cobertura de terreno según corresponda, los grupos de árboles se consideran bosques abiertos. La granja está destruida por la artillería y no ofrece cubierta ni obstaculiza la visual de los fuegos pero constituye un obstáculo para las formaciones y los sembradíos descuentan según reglamento

Se trata de un juego de ataque defensa pero con la posibilidad de un ataque ruso que retome las fortificaciones.

Fueron 17 períodos. La batalla comienza a las 12:45 y terminaba a las 17:00 con el arribo de la 3º división. Las fortificaciones no permiten mover los cañones para reapuntar y el ángulo de la zona batida se reduce a 15º a cada lado de cada placa. Si pueden retirarse los cañones de la posición. Los infantes de la 27º División rusa y los artilleros están con un estado físico del 75%. Los regimientos de jägers han quedado reducidos a un solo batallón cada uno.

Condiciones de victoria

Franceses: tomar la fortificación sur (Yuzhnaya ukreplenii). Si los franceses logran poner en la retaguardia de la fortificación, al menos, dos batallones de infantería y los rusos no los han sacado de allí, un período antes de finalizar el ejercicio, se considerará victoria francesa aunque no haya sido ocupado el reducto.

Rusos: sostenerse en las fortificaciones hasta el arribo de la 3º división. Si los rusos recuperan la fortificación central (Tsentral’noe ukreplenie) alcanzarán una gran victoria.




Los franceses fueron conducidos por Francisco, Bernard y Ramiro, mientras los rusos estuvieron al mando de Leandro y Martín. Jorge se mantuvo al margen y Cristián colaboró conmigo en la nunca bien reconocida, y mucho menos respetada, labor de arbitraje.




Comenzó el combate con el despliegue de ambas fuerzas. Los rusos ejecutaron un despliegue en torno al reducto donde estaba desplegada la batería pesada con sólo nueve cañones. Frente al mismo estaban los dos batallones de jägers desplegados en tiradores. Formaron su caballería, dos regimientos de coraceros, en su ala izquierda frente a una zona libre de obstáculos apoyados por su media batería a caballo. A ambos lados de la batería estaban los dos batallones del regimiento de Odessa desplegados en línea. En su flanco derecho los batallones del regimiento de Vilna formados en columna de ataque con la batería liviana en el centro. Detrás de la colina del reducto al abrigo de los fuegos franceses estaban los regimientos de Tarnopolsk y de Simbirsk.



El reducto ruso


Los franceses desplegaron su división de caballería (a cargo de Francisco), dos regimientos de coraceros y uno de lanceros, enfrentando a la caballería enemiga, precediendo al 33e de Ligne (a cargo de Bernard), que formó sus batallones en columna por compañías, y manteniendo la artillería atelada, lista para avanzar. En el centro desplegaron la batería de 12lbs. y al magnífico 15e Legere cuyo mando asumió el mismísimo Davout (Bernard). A la derecha formaron los batallones del el 48e de Ligne y el único batallón del Joseph Napoleón, manteniendo también su artillería atelada.
Luego de un breve intercambio de opiniones con referencia al campo de tiro de los cañones del reducto qué rápidamente fue zanjado gracias a la proverbial tolerancia y buena disposición del árbitro, la batalla comenzó con ambas caballerías avanzando al trote, al son de los clarines y con las banderas al viento, mientras las baterías pesadas de ambos bandos rompían el fuego.
La batería rusa apuntó sus cañones a la batería pesada francesa, destruyéndole dos piezas y provocándole algunas bajas, por su parte la batería francesa lograba hacer retirar a uno de los regimientos de coraceros rusos con su fuego. En el otro flanco Ramiro desplegó sus batallones de vanguardia en tiradores y los de atrás en columna, avanzando a tambor batiente sin recibir ninguna oposición por parte de los rusos.



La caballería francesa estaba ahora 3 a 1 y además uno de los batallones del Odessa se retiraba a ocupar la colina, mientras la batería bajaba para desplegarse en descubierta al pie de la misma. Parecía una gran oportunidad, sonaron las trompetas y comenzaron a trotar los caballos a la izquierda el 6e de Chevauleger Lanciers y a la derecha el 2e de Cuirassiers, al frente los esperaban el 3 batallón del Odessa ¡formado en línea! y los Coraceros de las Ordenes Militares, un regimiento de elite.

Cuando el comandante ruso se dio cuenta que sus infantes no habían recibido la orden de formar cuadro los lanceros ya estaban galopando a la carga sobre ellos. La batería a caballo rusa abrió un fuego furioso sobre los lanceros mientras ambos regimientos de coraceros se arrojaban a la carga uno sobre otro.


El choque de los coraceros fue terrible los escuadrones de primera línea se entrecruzaron para volver a chocar con los de segunda línea. Mientras tanto los lanceros llegaban al choque sobre los infantes del Odessa, pero estos lograron formar el cuadro (¡D10=7! ¡Y lo tiró Leandro!) Con el cuadro formado los rusos lograron rechazar a los sufridos lanceros que ya venían de soportar los tiros de la artillería rusa pero lo peor estaba por llegar, al retirarse la media batería caballo rusa les tiro con metralla por retaguardia…fue el fin de la unidad.
Los coraceros franceses lograron triunfar sobre los rusos en el segundo round de la melee, pero el regimiento que se había retirado por el fuego de la batería pesada ya se había reorganizado y galopaba al encuentro del enemigo. Comenzaba así una serie de combates entre los coraceros que marcaría decisivamente el curso de la batalla en ese flanco.


En el centro uno de los dos batallones del 15e Leger formado en tiradores cruzaba los bosques y valientemente se presentaban frente al reducto listo a enfrentar a los jägers rusos, al mismo tiempo el otro batallón, formado en columna por compañías avanzaba también hacia el reducto. Mientras tanto el ala izquierda francesa, a cargo de Ramiro, continuaba su avance sin sufrir bajas.


Vista general del campo de batalla


Los batallones del 33e de Ligne continuaban avanzando y haciendo algunos pasos de contradanza para poder esquivar a los coraceros en retirada y al mismo tiempo mantener una adecuada formación para el asalto. Aquí se produjo una importante intervención del arbitro pues Francisco y Ramiro discutían con cierto grado de acaloramiento sobre la mejor manera de conducir…¡las tropas de Bernard! Llamada que fuera la atención de los jugadores en repetidas veces poco a poco pudo nuestro amigo galo, que personificaba al gran Davout, hacerse cargo de sus unidades.



Pasado este episodio, se acercaban momentos decisivos en la batalla, cuando todo se estaba poniendo bueno, Ramiro se fue, quedando Bernard y Francisco a cargo de todo el ejército francés. Francisco comenzó a ocuparse el ala que había conducido Ramiro y se vio en figurillas para montar el ataque, pero contaba con la ventaja de la impasibilidad rusa en el sector ya que la artillería no había sido muy eficaz contra los infantes franceses formados en tiradores. En esos momentos Bernard y Francisco, como lo hacen muy habitualmente, hablaban en francés ante lo cual el ingenioso rosarino Leandro Gómez Arralde no se hizo esperar y preguntó - Che! ¿porqué los franceses hablan en francés?¿eh?.



Otra vista general del campo de batalla



Los rusos se decidieron a adelantar uno de sus batallones de jägers para atacar al Joseph Napoleón, y lo hicieron con tal éxito que parecía que podrían llegar a retomar ellos solos la fortificación central, con lo cual amenazarían todo el ataque francés de ese flanco y podrían llegar a alcanzar una gran victoria.

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Pero los afrancesados se replegaron dando frente al enemigo, hasta la batería a caballo que tenían sobre su flanco izquierdo y la segunda carga de los jägers se estrelló contra la metralla disparada a quemarropa por los artilleros franceses.


En el centro uno de los batallones del 15e Leger haciendo gala de su extraordinario entrenamiento, sobre la marcha, se forma en línea para abrir fuego y con el apoyo del otro batallón, formado en columna, empiezan a presionar sobre el reducto. En flanco izquierdo francés se produce un passaje de lignes a fin de llevar las columnas al frente y dejar atrás los tiradores para que se reúnan y formen columnas, el ataque decisivo estaba en marcha.

En la derecha los coraceros franceses seguían sus titánicos combates contra los coraceros del Zar hasta que el astuto Saint Germain (Francisco) logró posicionarse para hacer entrar en combate a su batería a caballo. En el centro los ligeros arrasaban a los jägers y en la izquierda la infantería francesa triunfó en casi todos los combates.

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El porcentaje de capacidad de combate que los rusos habían logrado inclinar a su favor en un 2% de pronto favoreció a los franceses en un 10%. El cansancio, el calor y la pérdida de toda la artillería (aunque una batería a caballo podía ser recuperada) llevaron a los comandantes rusos a ordenar la retirada y con magnanimidad felicitaron a sus adversarios circunstanciales quienes estaban contentísimos con su victoria.

Como siempre mi agradecimiento a los verdaderos amigos que mas allá del juego saben estar siempre presentes aunque sea con una llamada como Esteban o con una gentil visita como Cristián y Jorge. Finalmente mi especial agradecimiento a los jugadores de ambos bandos quienes al finalizar, manifestaron más de una vez que les gustó el escenario y que la pasaron muy bien, aunque seguramente no tanto como yo que disfruté muchísimo de una hermosa jornada rodeado de amigos

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